Mejor pienso en ti y a ver
qué nos sale:
Me encantas cuando me
preguntas tranquilo y condescendiente
¿Dónde está todo
aquello que digo ver en ti y que por más que lo buscas,Tú no lo encuentras?
Adoro tus ojos fieros y tus pupilas de almendra haciéndome sonreír
mientras me cuentas historias de heladas y ventarrones,
tus manos de niño inventan caminos secretos en mi espalda
que borras en sigilo con tus labios para que no se puedan volver a encontrar.
Amo tu fuerza.
Tu paz, tus anhelos, tu rabia, tu tranquilidad.
Amo que seas el cómplice silencioso de todas mis aberraciones
y que muchas veces, simplemente estés allí
quieto, callado, abrazándome como si tus brazos fueran raíces
que me atrapan (y yo no quiero escapar).
De repente, te vuelves
grande, enorme, inmenso…
y me quedo como una niña chiquita,
mirándote.Observando la formas y las maneras con las que mandas al mundo
y cuando ese espacio ha terminado,
vuelves y te acurrucas en mí respirando la misma paz
con la que me envuelves y cobijas…
Te amo como sabía que quería
amarte.
Te amo para mi, para siempre
No me supongo una realidad en
la que tú no aparezcas.
Mi mundo se fundió con el
tuyo y se convirtió en uno solo,algo así como tú y la vida que explota burbujeante,
únicos e inseparables.
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